11.11.12

Umbráculo en cercedilla, Javier Vellés y María Luisa López Sardá

Fuente: Revista COAM, acordes arquitectónicos
Fotografía: Alfonso Quiroga



El encargo de un lugar de acogida en torno a un merendero y un punto de venta de leña para la gente que iba a Cercedilla llega en el año 1976 a manos de unos jóvenes arquitectos Javier Vellés y María Luisa López Sardá. El emplazamiento, tras unos primeros momentos de incertidumbre, se dispone finalmente a media altura de la ladera en un lugar utilizado como punto para comer al aire libre al otro lado del arroyo, orientando a sur la construcción.

Lo que en un principio se preveía como la demanda de una pequeña cabaña de venta de madera finalmente se convierte en la construcción de un gran umbráculo en el que aparecen usos de piscina, vestuarios y almacenes sumándose al merendero; y que consigue racionalizar las relaciones de luz y sombra que se reproducen en el monte en las zonas de clareo y las zonas de bosque a través del uso de la madera como referente y el vacío como valor fundacional.

El proceso de aproximación al edificio, desde la cota inferior, permite tomar consciencia de los diferentes niveles a los que la construcción de madera da respuesta. Mediante un entramado de tres niveles de 10,80m de ancho apoyado en una retícula de pilares de 3,60m x 7,20m, se disponen los diferentes usos requeridos, quedando la piscina en el borde inferior, y resultando como gran espacio de sombra el nivel intermedio en el que cohabitan la madera y el terreno moldeado de manera aterrazada.

La cubierta y sus elementos, realizado con escuadrías de sección de 6x6cm, se libera de cerramiento y cubrición salvo en los espacios cerrados de los edificios-vagón, en los que planchas de plástico translúcido permiten el paso de la luz. El cerramiento de dichos espacios se lleva a cabo con el uso de paneles sándwich de madera y alma de aislamiento térmico; y el sistema de protección solar con elementos de sección rectangular de 12x2,5 cm.

La utilización de la madera no es sino una posición respecto al terreno en el que el edificio reposa destilando ligereza y respeto, limitando el descontrol en el uso del monte; y en el que se produce una continuidad del bosque natural y el ”bosque” artificial que recrea el umbráculo con el vacío como razón de ser.

Año: 1976-79
Superficie: 1060 m2
Lugar: Las Dehesas, Cercedilla, Madrid
Bibliografía: Asensio Galvín, Carlos; AITIM Sept-Oct 2009










No hay comentarios:

Publicar un comentario